
nonsense
New Member
- Jun 27, 2020
- 3
Me cuesta mucho hablar sobre esto. Pienso que hay mucha gente allá afuera sufriendo por circunstancias peores que las mías y que, por cierto, mi situación no debería ser ni siquiera vista. Como sea, aquí voy.
Cuando era adolescente era un muchacho muy deprimido, autodestructivo y suicida. Me crié en una familia religiosa y, por lo tanto, intentaron reprimir esa espantosa conducta mía. No los culpo. Por entonces, yo pensaba que sería temporal todos esos sentimientos negativos que me estaban hiriendo conforme los días pasaban. Que quizás sería algo de las hormonas, ya saben. Pero ahora en la actualidad todo eso sigue persistiendo con fuerza.
Ahora tengo menos motivos para vivir y más para morir. Realmente mi vida es mediocre y pésima; no tengo buen rendimiento como miembro activo en la comunidad, mi capacidad intelectual es muy baja, las jaquecas se han vuelto muy frecuentes y las pocas parejas que he tenido me han engañado. El futuro es nebuloso y poco diáfano. Incluso mi pequeño pasatiempo de escribir y leer se está apagando. Ya no le encuentro el placer a ello.
Es una verdad sucia y negra: la muerte está a la vuelta de la esquina. Algo se ha comido todo lo poco que he tenido. Y ahora estoy vacío y es un hecho que a nadie le afectará mi muerte.
Lo único que me falta es la fuerza para agarrar la soga escondida que está en mi armario, guardada debajo de toda esa ropa insípida. Por lo visto, soy tan inútil que ni siquiera me atrevo a colgarme. Pero lo tengo que hacer. Lo siento como una obligación ya a este punto.
Y eso es todo. Esto era sólo para un poco de desahogo emocional. Perdonen que les haya robado su tiempo en leer esta basura y que estuviera en español. Adiós.
Cuando era adolescente era un muchacho muy deprimido, autodestructivo y suicida. Me crié en una familia religiosa y, por lo tanto, intentaron reprimir esa espantosa conducta mía. No los culpo. Por entonces, yo pensaba que sería temporal todos esos sentimientos negativos que me estaban hiriendo conforme los días pasaban. Que quizás sería algo de las hormonas, ya saben. Pero ahora en la actualidad todo eso sigue persistiendo con fuerza.
Ahora tengo menos motivos para vivir y más para morir. Realmente mi vida es mediocre y pésima; no tengo buen rendimiento como miembro activo en la comunidad, mi capacidad intelectual es muy baja, las jaquecas se han vuelto muy frecuentes y las pocas parejas que he tenido me han engañado. El futuro es nebuloso y poco diáfano. Incluso mi pequeño pasatiempo de escribir y leer se está apagando. Ya no le encuentro el placer a ello.
Es una verdad sucia y negra: la muerte está a la vuelta de la esquina. Algo se ha comido todo lo poco que he tenido. Y ahora estoy vacío y es un hecho que a nadie le afectará mi muerte.
Lo único que me falta es la fuerza para agarrar la soga escondida que está en mi armario, guardada debajo de toda esa ropa insípida. Por lo visto, soy tan inútil que ni siquiera me atrevo a colgarme. Pero lo tengo que hacer. Lo siento como una obligación ya a este punto.
Y eso es todo. Esto era sólo para un poco de desahogo emocional. Perdonen que les haya robado su tiempo en leer esta basura y que estuviera en español. Adiós.